5 diferencias entre el chocolate ecológico y el chocolate tradicional

5 diferencias entre el chocolate ecológico y el chocolate tradicional 

Las diferencias entre el chocolate ecológico y el chocolate tradicional evidencian la superioridad de aquel sobre este. Consecuentemente, su consumo gana terreno día tras día y es que, cuando lo pruebas, ya no hay marcha atrás 🌿.

Decimos que un chocolate es ecológico, orgánico o bio cuando cuenta con una certificación que acredita la pureza de sus ingredientes y su sostenibilidad medioambiental. Por contra, los chocolates convencionales o tradicionales son todos aquellos cuya receta y producción no son merecedoras de dicho reconocimiento. 

Producción e impacto medioambiental

Chocolate tradicional

A las grandes multinacionales solo les interesa multiplicar sus beneficios. Es por ello que implementan prácticas de cultivo masivas que no resultan éticas ni para el medio ambiente ni para los trabajadores. La explotación laboral, el trabajo infantil o el uso de pesticidas y fertilizantes sintéticos son habituales en la industria.

Chocolate ecológico

La producción a pequeña escala y el fuerte compromiso con la responsabilidad social son rasgos definitorios de quienes producen chocolates bio. El cultivo respetuoso con el medio ambiente y con las prácticas propias del comercio justo son valores en alza entre unos consumidores cada vez más concienciados. Se trata, de hecho, de una de las principales diferencias entre el chocolate ecológico y el chocolate tradicional.

Ingredientes

Chocolate tradicional

En su afán por maximizar sus ganancias, las marcas de chocolate convencional adulteran este producto para reducir el porcentaje de cacao. Así pues, lo sustituyen con todo tipo de ingredientes artificiales y poco saludables (azúcar, jarabe de maíz de alta fructosa, cadmio, colorantes químicos, etc.).

Chocolate ecológico

El chocolate ecológico se distingue por su pureza y compromiso con la salud y el medio ambiente. Producido sin el uso de tratamientos químicos ni pesticidas, garantiza la ausencia de metales pesados, ofreciendo una opción más segura y natural. El cultivo responsable del cacao promueve prácticas sostenibles que protegen el ecosistema, aunque esto implica un mayor coste debido al cuidado y dedicación que requiere.

Optar por chocolate ecológico es elegir un producto de alta calidad cuya pureza y autenticidad se reflejan en cada bocado. Esta elección no solo beneficia al consumidor, sino que también respeta y preserva el planeta, combinando sabor y conciencia ambiental en perfecta armonía.

Sabor: una de las grandes diferencias entre el chocolate ecológico y el chocolate tradicional

Chocolate tradicional

Al ser un alimento ultra procesado y lleno de aditivos químicos, el chocolate convencional no es más que un pálido reflejo del verdadero chocolate. Su sabor edulcorado y artificial se aleja por completo de la autenticidad y los matices que nos brindan los chocolates genuinos. Se trata de una de las diferencias entre el chocolate ecológico y el chocolate tradicional más evidentes.

Chocolate ecológico

Una de las grandes bazas de los alimentos orgánicos es lo genuino de su sabor… y el chocolate ecológico es una excelente muestra de ello. Su inconfundible intensidad, su aroma penetrante y su textura cremosa convierten su degustación en una inolvidable experiencia gourmet.

Aporte nutricional

Chocolate tradicional

En lo que a valores nutricionales respecta, los chocolates tradicionales ejemplifican el refrán «de aquellos polvos vienen estos lodos». Al ser el resultado de una receta empobrecida y adulterada, su aporte alimenticio es más que cuestionable. Ello ha llevado a que el chocolate sea visto como un producto que engorda y no alimenta. 

Chocolate ecológico

Está demostrado que los chocolates certificados como ecológicos son uno de los superalimentos más completos que existen. No en vano, su aporte de hierro (+33%), antioxidantes (+18%) y potasio (+84%) superan ampliamente al chocolate tradicional.

Efectos sobre tu salud

Chocolate ecológico

A resultas de todo lo anterior, el chocolate bio se revela como un alimento capaz de cuidar de tu salud a múltiples niveles. Así, su consumo habitual aporta efectos antidepresivos y previene numerosas enfermedades (cáncer, problemas cardíacos, demencia, etc.).

Chocolate tradicional

Aquello de «somos lo que comemos» encaja muy bien con los chocolates convencionales. Su consumo se asocia con problemas de salud como el TDAH, la diabetes o la obesidad. Además, este tipo de chocolate quintuplica la cantidad de colesterol con respecto a las variedades bio.

Las diferencias entre el chocolate ecológico y el chocolate tradicional evidencian que el primero es una opción mucho más inteligente que el segundo. Eso es, precisamente, lo que te obtienes cuando apuestas por Higón Chocolates Ecológicos. Nuestra marca pone en tu paladar una delicia libre de gluten y lactosa, vegana y con certificación bio. ¿Te imaginas lo que supone saborearla?